Confiabilidad.
El sistema hidráulico es consistentemente confiable. A diferencia de otros
sistemas mencionados, el mismo no está sujeto a cambios en el desempeño o a
fallas súbitas inesperadas.
Sensibilidad
de control. El líquido confinado de un sistema hidráulico opera como una
barra de acero al transmitir la fuerza. Sin embargo, las partes móviles son
livianas y pueden ser puestas en movimiento o paradas casi instantáneamente.
Las válvulas dentro del sistema pueden iniciar o parar la circulación de
fluidos presurizados casi en forma instantánea y requerir muy poco esfuerzo
para ser manipuladas. El sistema completo es muy manejable por el control del
operario.
Flexibilidad
de instalación. Las líneas hidráulicas pueden ser colocadas casi en cualquier
lugar. A diferencia de los sistemas mecánicos que deben seguir recorridos
rectos, las líneas de un sistema hidráulico pueden ser dirigidas alrededor de
obstáculos. Los principales componentes de los sistemas hidráulicos, con la
excepción de las bombas impulsadas localizadas cerca de la fuente de
suministro de potencia, pueden ser instaladas en una variedad de lugares. Las
ventajas de estas características son fácilmente reconocibles al estudiar las
muchas localizaciones de los componentes hidráulicos en varios tipos de
aviones.
Requerimientos
de poco espacio. Las partes funcionales de un sistema hidráulico son pequeñas
en comparación con aquellas de otros sistemas, por lo tanto, el requerimiento
de espacio es comparativamente bajo.
Estos
componentes pueden ser fácilmente conectados mediante líneas de cualquier
longitud o contorno. Las mismas pueden ser separadas e instaladas en espacios
pequeños, sin uso o fuera del camino. Áreas grandes con falta de uso
para los sistemas hidráulicos con innecesarias, en resumen, los
requerimientos especiales de espacio son reducidos a un mínimo.
Bajo
peso. El sistema hidráulico pesa relativamente poco en comparación con la
cantidad de trabajo que hace. Un sistema mecánico o eléctrico capaz de hacer
el mismo trabajo pesa considerablemente mas. Dado que el peso de la carga no
útil es un factor importante sobre una aeronave, el sistema hidráulico es
ideal para el uso en aviación.
Auto
lubricación. La mayoría de las partes de un sistema hidráulico operan en un
baño de aceite. Los pocos componentes que no requieren lubricación periódica
son los vínculos mecánicos del sistema.
Bajos
requerimientos de mantenimiento. Los registros de mantenimiento
consistentemente muestran que los ajustes y las reparaciones de emergencia a
las partes de un sistema hidráulico son necesarios con poca frecuencia.
Fuerza
La
palabra “fuerza” usada en un sentido mecánico, significa un empuje o
tracción. La fuerza, debido a que empuja o tracciona, tiende a causar que el
objeto sobre el cual es aplicado la fuerza se mueva. En ciertas
circunstancias, cuando la fuerza que actúa sobre un objeto no es suficiente
para superar su resistencia o arrastre, ningún movimiento tendrá lugar. En
tales casos, la fuerza aún es considerada como presente.
Dirección
de la fuerza. La fuerza puede ser ejercida en cualquier dirección. La misma
puede actuar hacia abajo: como cuando la gravedad actúa sobre un cuerpo,
empujándolo hacia la tierra. La fuerza puede actuar en forma transversal:
como cuando el viento empuja un bote a través del agua. Una fuerza puede ser
aplicada hacia arriba: como cuando un atleta arroja (empuja) una bola hacia
el aire. O una fuerza puede actuar en todas las direcciones a la vez: como
cuando un globo explota.
Magnitud
de la fuerza. La extensión (magnitud) de una fuerza dada es expresada por
medio de una única medición. En los Estados Unidos, la libra (pound) es la
unidad de medición de la fuerza. Por ejemplo, se emplearon 7,5 millones de
libras de empuje para elevar (fuerza) la nave Apolo fuera de su lanzadera. La
fuerza hidráulica es medida en la cantidad de libras requeridas para
desplazar un objeto dentro de un área específica, como por ejemplo una
pulgada cuadrada.
Presión.
La
palabra “presión”, cuando es usada en conjunto con sistemas mecánicos e
hidromecánicos, tiene dos usos diferentes. Uno es técnico; el otro; no
técnico. Estos dos usos pueden ser fácilmente distinguidos entre sí por la
presencia o ausencia de un número. En el uso técnico, un número siempre
acompaña a la palabra “presión”. En el uso no técnico, ningún número está
presente. Estas definiciones son explicadas con mas detalles a continuación.
Técnico.
El número que acompaña a la presión contiene información específica acerca de
la fuerza significativa de la fuerza que es aplicada. La magnitud de esta
fuerza aplicada es expresada como el valor al cual la fuerza es distribuida
sobre el área sobre la cual está siendo aplicada. Así, libras por pulgada
cuadrada (psi) expresan una relación de presión como las millas por hora
(mph) expresan velocidad. Un ejemplo de esto es: “El sistema hidráulico en el
avión UH-1 funciona a 1500 psi”.
No
técnico. La palabra “presión”, cuando es usada en el sentido no técnico
indica que una cantidad no especificada de fuerza es aplicada a un objeto.
Frecuentemente adjetivos tales como liviano, medio o pesado son usados
para quitar algo de la vaguedad concerniente a la magnitud de la fuerza
aplicada.
Medición
de presión
Cuando
se usa en sentido técnico, la presión es definida como la cantidad de fuerza
por unidad de área. Para tener significado universal, consistente y
definitivo, la unidades estándar de medición son usadas para expresar
presión. En los Estados Unidos, la libra es la unidad de medición usada para
la fuerza, y la pulgada cuadrada es la unidad de área. Esto es comparable a
la unidad de medición usada para la velocidad: la milla es la unidad de
medición de distancia, y la hora es la medición de tiempo.
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martes, 25 de junio de 2013
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